Ir al gimnasio nos mantiene en forma, pero nuestra salud puede verse afectada por la altísima presencia de bacterias en el equipamiento
ir al gimnasio es un hábito importante para mantenerse en forma y mejorar la salud física. Sin embargo, muchas personas no se dan cuenta de la riesgos de higiene asociados con el uso de equipos compartidos. Según varios estudios, incluido uno realizado por el sitio FitRatedel equipo del gimnasio puede acomodar niveles sorprendentemente altos de bacteriasa menudo mucho más altos que los de objetos cotidianos como asientos de inodoro o lavabos en baños públicos.
De hecho, la investigación encontró que las bicicletas estáticas, las cintas de correr y las pesas libres presentes en tres gimnasios diferentes, cada una contenía más de un millón de bacterias por pulgada cuadrada. Estas bacterias incluyen cocos grampositivos, que pueden causar infecciones de la piel, bacilos gramnegativos, algunos de los cuales son resistentes a los antibióticos, y Bacillus, que causa infecciones respiratorias, oculares y de oído.
Con las precauciones adecuadas es posible minimizar los riesgos para la salud
Los datos muestran que una bicicleta estática puede aguantar 39 veces más bacterias que una bandeja de cafetería, mientras que las pesas libres pueden acomodar Hasta 362 veces más gérmenes que el asiento de un inodoro.. Ni siquiera las cintas de correr están exentas: en promedio, están 74 veces más sucio que el grifo del baño público. Estas cifras son alarmantes si se tiene en cuenta la frecuencia con la que las personas tocan los equipos durante un día en el gimnasio.
Para protegerse es fundamental tomar algunas medidas preventivas. Primero, desinfectar el equipo tanto antes como después de su uso es fundamental para reducir el riesgo de contaminación. También es recomendable evitar tocarse la cara durante el entrenamiento y lavarse bien las manos una vez finalizada la sesión. Cámbiate la ropa de gimnasia inmediatamente y lávala. después del entrenamiento es una medida adicional para prevenir la propagación de bacterias.
Finalmente, aquellos que quieran eliminar por completo el riesgo de exposición a gérmenes en los gimnasios públicos podrían considerar comprar equipos para entrenar en casa. A medida que aumenta la disponibilidad de equipos de fitness asequibles y de alta calidad, es posible mantenerse en forma sin tener que lidiar con los problemas de higiene asociados con los gimnasios públicos.