En todas las relaciones, tarde o temprano, se discute. Solo un comentario fuera de lugar, un tono que no le gusta o un día comenzó mal. Sin embargo, a veces, evitar que la situación explote es más simple de lo que parece.
Según la escritora Rachel Bowie, la clave radica en una frase simple: “Siempre parte de la suposición de que el otro actúa de buena fe”.
En su artículo para Espumaje de puroBowie dice que esta simple idea cambió su forma de manejar los momentos de tensión: en lugar de reaccionar instinto, trate de detenerse y recordar que ella y la pareja están del mismo lado. Esto le permite ver las cosas desde la perspectiva del otro y enfrentar la conversación de una manera más tranquila.
Lo que dice la ciencia sobre “dar el beneficio de la duda”
No es solo una intuición personal. Un estudio reciente de Greater Good Science Center de la Universidad de Berkeley analizó los efectos de “Da el beneficio de la duda” en relaciones.
Los resultados son claros:
Bowie trae ejemplos concretos: una vez que se ha olvidado de inscribir a su hijo en un campo de verano, dándose cuenta solo la noche anterior. En lugar de enojarse, su esposo se dio cuenta de que había sido un período lleno de compromisos. Al día siguiente encontraron una solución juntos.
Las frases que corren el riesgo de empeorar la situación
Si algunas palabras ayudan a calmar las aguas, otras tienen el efecto opuesto. El psicólogo Jeffrey Bernstein explica que las expresiones como “estás exagerando”, “no es un gran problema” o “eres demasiado sensible” pueden percibirse como devaluadores, incluso si se dicen con buenas intenciones.
Con el tiempo, este idioma socava la confianza y hace que sea más difícil comunicarse de manera serena.
Cómo poner en práctica esta estrategia
Aquí hay algunas formas simples de aplicar el concepto de “comenzar de buena fe” en la vida cotidiana:
Elegir creer en la buena fe del otro no significa fingir que los problemas no existen, sino lidiar con menos tensión y más colaboración. Y, según la ciencia, este enfoque es bueno tanto para la relación como para el bien personal.