En Texas se presentó un proyecto de ley que está haciendo mucha discusión. El objetivo de la propuesta es imponer Etiquetas de advertencia En muchos productos alimenticios transformados, incluidos bocadillos muy populares como M&M, Skittles y Doritos. Estas etiquetas deben informar que Estos productos no son “recomendados para el consumo humano”dado que contienen ciertos ingredientes considerados potencialmente dañinos.
Pero ¿De qué ingredientes se trata?
El Proyecto de Ley de Texas, conocido como el Proyecto de Ley 25 del Senado, se centra en una serie de aditivos químicos, tintes artificiales y conservantes ampliamente utilizados en bocadillos industriales para mejorar su sabor, color y duración de la conservación. Entre estos, hay varios tintes de alimentos que han estado durante mucho tiempo en el centro de disputas y han sido prohibidos o fuertemente regulados en otras partes del mundo, en particular en la Unión Europea, pero también en países como Australia, Canadá y el Reino Unido.
Entre los tintes involucrados están, por ejemplo:
Además de los tintes, la ley también involucra algunos conservantes y aditivos como:
Por lo tanto, la propuesta de Texas quiere que, a partir de 2027, todos los productos alimenticios que contengan al menos uno de estos ingredientes informa una etiqueta claramente visible con la redacción:
Atención: este producto contiene un ingrediente no recomendado para el consumo humano por las autoridades competentes en Australia, Canadá, la Unión Europea o el Reino Unido.
Esta medida tiene como objetivo aumentar la conciencia del consumidor con respecto a las sustancias que, aunque aún legales en los Estados Unidos, son consideradas problemas o peligrosos por las autoridades reguladoras de otros países avanzados.
La iniciativa ya ha atraído mucha atención a nivel nacional, no solo por el fuerte mensaje que quiere transmitir, sino también porque se trata de bocadillos muy populares y amados como M&M, Skittles y Doritos, productos que millones de personas consumen diariamente a menudo sin saber en detalle lo que contienen.
Reacciones
Por un lado, muchas asociaciones de consumidores y grupos para la salud pública dan la bienvenida a esta iniciativa favorablemente, viéndola como un paso importante hacia una mayor información y protección. Por otro lado, la industria alimentaria y algunos consumidores temen que estas etiquetas puedan generar confusión y pánico, dañando marcas históricas y amadas sin ciertas razones científicas.
La ley aún se está discutiendo en Texas, pero ya ha convertido un debate que va más allá de los límites del estado. La pregunta central sigue siendo: ¿cuánto debemos preocuparnos por los ingredientes en los bocadillos diarios? ¿Y una etiqueta tan drástica realmente puede empujar a las empresas a mejorar las recetas o solo corre el riesgo de asustar a los consumidores?
Independientemente del resultado de la propuesta, esta iniciativa de Texana podría marcar un punto de inflexión en el camino en los Estados Unidos se aborda la seguridad alimentaria. Si se aprueba la ley, no se puede excluir que otros estados la sigan, contribuyendo a una regulación más severa sobre los ingredientes de los bocadillos.