Un cambio cerebral importante ocurre en la mitad de la vida, con un punto de inflexión clave, alrededor de 43 años, que anticipa el envejecimiento cognitivo
El envejecimiento del cerebro? No es gradual, el punto de inflexión crucial a los 43 años. Un estudio reciente realizado a escala global ha cuestionado la idea de que el declive cognitivo Es un proceso lento y constante. Los resultados indican que el Verdadero envejecimiento del cerebro Podría comenzar mucho antes de lo que piensas, con un cambio drástico que ocurre alrededor de los 43 años de edad.
Un equipo de investigadores del Universidad Stony Brook ha analizado más de 20,000 escaneos cerebrales de bases de datos de referencia como la Biobanco del Reino Unido y elProyecto Human Connectomeutilizando resonancias magnéticas funcionales (fMRI) para observar la evolución de las conexiones cerebrales durante el curso de la vida.
Al contrario de lo que se pensó, la descomposición no sigue una trayectoria lineal. La estabilidad de las redes cerebrales sigue una curva en forma de “S”, conocida como sigmoide: permanece estable hasta 43 años de edad, se somete a una rápida desestabilización que culmina alrededor de los 66 años de edad, y finalmente se estabiliza nuevamente.
El período más vulnerable? Que entre 40 y 60 años. Una fase crítica, pero también llena de potencial, como explicó Lilianne Mujica-ParodiDirector de Laboratorio de neurodiagnóstico computacional.
Comprender cuándo y cómo acelera el envejecimiento cerebral nos permite identificar los mejores momentos para intervenir
El cerebro pierde la eficiencia metabólica en la mediana edad
Los investigadores encontraron que, con la edad, el cerebro comienza a perder su capacidad para usar glucosa, su principal fuente de energía. Esto ocurre debido a la reducción de la sensibilidad a la insulina y al mal funcionamiento de los transportadores como GLUT4responsable del paso de glucosa a las neuronas.
Los primeros signos de inestabilidad cerebral se asociaron con un aumento en los marcadores de azúcar en la sangre, como HbA1c, un indicador bien conocido de glucosa en la sangre. Las regiones cerebrales que muestran un envejecimiento más rápido son precisamente las que más dependen de GLUT4. En la práctica, las áreas que requieren más energía también son las más vulnerables a la resistencia a la insulina.
Pero el estudio no se detiene en el diagnóstico: también ofrece una posible solución.
Otro transportador, llamado MCT2permite el cetón Para llegar a las neuronas. Las cetonas son moléculas alternativas a la glucosa, no requieren insulina y se producen durante el ayuno, con dietas bajas en carbohidratos o mediante suplementos específicos.
Las cetonas como combustible alternativo: los mayores beneficios entre 40 y 59 años
Para probar esta hipótesis, los investigadores realizaron un estudio sobre 101 participantes, administrando a cada dosis personalizadas de glucosa o cetona. Los resultados fueron sorprendentes.
En adultos jóvenes (20-39 años), los beneficios de las cetonas en el cerebro fueron modestos. Pero en el grupo de edad de 40 a 59 años, cuando el cerebro comienza a estar bajo estrés metabólico, pero aún mantiene una cierta resiliencia, los efectos positivos han sido los más evidentes.
El efecto de la monoestonia de cetona fue 84.62% más alto que el observado en el más joven.
Sin embargo, en los ancianos (60-79 años), la efectividad de la intervención se redujo drásticamente: Menos de la mitad en comparación con el grupo intermedio.
Botond Antalel primer autor del estudio, explicó:
En lugar de esperar los síntomas cognitivos, que surgen solo cuando el daño ya se extiende, podemos usar marcadores neurometabólicos para identificar a los sujetos en riesgo e intervenir Antes.
¿Cómo prevenir?
Este estudio revoluciona la forma en que pensamos sobre el envejecimiento del cerebro. Ya no se trata de perseguir el daño cognitivo una vez manifiesto, sino de prevenirlos cuando las neuronas aún pueden responder, como dijo Mujica-Parodi:
Hemos identificado una ventana crítica durante la mediana edad, cuando las neuronas tienen hambre de energía pero aún vitales. Es el momento ideal para proporcionar combustible alternativo
Después de 60 años, sin embargo, el largo período de “ayuno de energía” ya podría haber desencadenado una cadena de efectos fisiológicos que dificultan la intervención.
Aunque los resultados no implican la ingesta automática de los suplementos de cetona en todos los 40, aún se abren a nuevas carreteras para el Prevención temprana del deterioro cognitivo. El cambio real está en el paradigma: ya no es la medicina reactiva, sino la estrategia preventiva, como señala anal:
Es un punto de inflexión real en la forma de pensar en la prevención del envejecimiento cerebral.
Con el aumento esperado en los casos de demencia para 2050, la necesidad de actuar es más urgente que nunca. Este estudio ofrece algo raro: un mapa, un momento y una ventana.